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ÉPOCA MODERNA
Una innovación del Renacimiento fue la introducción de la literatura en el sistema de la cultura moderna.
Los Studia humanitatis ( gramática, retórica, filosofía moral e historia) le dieron un lugar y un prestigio. La
poesía se convierte en uno de los frentes de batalla de los nuevos letrados frente al medioevo. El
renacimiento dio forma unitaria a la literatura castellana (desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII).
La génesis del castellano literario moderno
En el campo de la literatura, el vulgar irá ganando terreno de forma lenta y diversa según los países. A
principios del siglo XVI, el latín y el vulgar se presentan como una opción literaria en la que el latín tiene
primacía absoluta. Hasta 1535, una carrera literaria sólo podía darse en latín ( como en Bembo). El cultivo
literario del latín entra como moda endeble a fines del siglo XV. A partir de los años 40 empieza a divulgarse la
poesía en metros italianizantes, la figura del poeta alcanza una dignidad que no había tenido antes y
justamente entonces se inicia el florecimiento de la poesía neolatina en España. A lo largo del siglo XVII, el
latín desaparece como lengua literaria, pero todavía seguirá viva como lengua de cultura de ciertos géneros
como el ensayo, la biografía o el tratado científico.
Los géneros y las formas
La tradición clásica medieval, culta y popular, ofrece una sustancia que se transforma para encarnar la nueva
literatura.
Empezando por la poesía, el Renacimiento da un fuerte giro a la situación medieval. El cambio se da cuando
las innovaciones de Garcilaso pueden asimilarse e inician su andadura hispánica. Los textos clásicos se
codean con los textos poéticos neolatinos de un Sannazaro, un Pontano o un Tomás Moro. La tradición
estrictamente clásica fue importante. La incidencia de la poesía en latín se extiende también a procedimientos
estilísticos y conceptuales. La imitación de Horacio se encuentra ya en al poesía italianizante desde Garcilaso.
Con la primera generación barroca los poetas neolatinos del XVI se han convertido en clásicos.
La prosa moderna española nace al abrigo de las corrientes estilísticas de la prosa neolatina que la precede:
• el ciceronianismo nace como una disputa teórica y práctica ante una necesidad comunicativa
perentoria y reflejada la necesidad de fijar una norma dentro de los múltiples estratos del latín. Este
prevalece en la enseñanza de los jesuitas. Este estilo influencia la prosa romance hasta finales del
siglo XVI.
• el senequismo toma como modelos a Séneca y Tácito ( Quevedo, Gracian, Fray Hortensio
Paravicino). El siglo XVIII rompe lentamente con el principio de imitación y con el estilo taciteo y
senequista del barroco. Nacerá la prosa del castellano moderno.
Los principales géneros en prosa latina del humanismo son: la historia, la oratio, el diálogo, la epístola, la
colección de sentenciae con comentario, los miscellanea de temas filologicos y eruditos que gozan de títulos
variables. La literatura vulgar aclimatará l a mayor parte de estas formas y las convertirá en los géneros que
llegan hasta nosotros. La epístola es sin duda el género más fructífero. Por una parte cumplirá funciones
informativas y de sátira política y por otra parte dará pie a la aparición de la primera novela.
En el siglo XVIII, al Antimo de una burguesía más fornida, volverá a renacer el teatro clasicista, y, junto a los
principios aristotélicos, volverán a renacer las doctrinas horacianas sobre el decoro, el principio de imitación
retórica o el deleitar enseñando.
Tradición isocratica y literatura
La elocuencia, las enseñanzas humanisticas y la literatura se convertirán desde entonces en la base de la
educación del hombre de los grupos dominantes. El dominio de la literatura será una marca de clase hasta
nuestros días. La fijación de este sistema en España lo harán los jesuitas, que darán lad pautas principales a
la educación y a las formas de enseñanza de las restantes órdenes religiosas que monopolizan la
docencia. Las letras y la literatura irán siempre en detrimento de la ciencias casi hasta el siglo XX. En el siglo
XVIII se darán las primeras batallas contras la introducción de la ciencia moderna. Es la tradición isocratica de
la primacía de la lengua que está en el fondo de las críticas al uso del castellano en obras innovadoras. Está
también la dicotomía renacentista entre la sabiduría cristiana y formas paganas, Cristo y Virgilio. En el
renacimiento se profundiza en este dualismo. Hay la fusión entre poética y retórica que se práctica desde el
Renacimiento y llega hasta el siglo XVIII. En el renacimiento la imitación de autores se convirtió en un código
de las literaturas romances y llega hasta el Neoclasicismo, en el que se encuentran los primeros síntomas de
su resquebrajamiento.
Literatura y civilización
La idea de que la literatura es un instrumento civilizador de los pueblos aparece también con el humanismo y
será una parte más o menos importante de la ideología dominante Europea. La poesía reclama los honores
máximos enfrentándose implícitamente a los honores del guerrero.
Esta equivalencia entre literatura y civilización todavía tendrá complejas derivaciones en la Península con
el ‘noucentisme’ catalán y en el classicisme de Eugeni d’Ors ( presenta en el siglo XX, un programa de
transformación de la sociedad catalana a través del CLASICISMO; CLASICISMO como recuperación de las
formas greco-latinas y del humanismo perdido para Cataluña). Ligado a lo anterior está también el típico de la
función didáctica de la literatura (principio horaciano – prodesse et delectare). En el siglo XVIII volverá
a esgrimarse el viejo didactismo al servicio de los gustos neoclásicos.
El senequismo español
Un cierto senequismo eclecticista y pesimista se aclimata fuertemente en España, gracias al sentimiento
constante de frustración política a la que se ven abocados estos grupos. Su momento culminante fue el
Barroco, cuando se conjugó con el lento hundimiento del erasmismo y la aparición del tacitismo político.
Miro, erotismo y poesía
El erotismo moderno viene moldeado por la tradición latina a varios niveles (Ars Amandi- Ovidio). En realidad
lo que hace es trasladar al castellano algo de la concreción de la poesía latina y de su visión no cristina de la
experiencia amorosa. Ese sentido plástico y carnal del erotismo se encuentra antes en los poetas latinos y
neolatinos. Estas líneas de erotismo clásico llegan hasta el siglo XIX.
El mito como código poético y como tema está también relacionado con lo anterior. El Renacimiento
redescubre el mito como una unidad de expresión y contenido. Las figuras míticas sirven como vehículo y
apoyo de un cierto erotismo culto que toma esa forma.
4. La literatura oriental y la literatura española
La cultura oriental se reflejó en todo el mundo occidental de la Edad Media y aun de los primeros tiempos de
la Edad Moderna. El perjuicio antiarabe se basa en la falsa creencia de la incomunicación del mundo cristiano
y del mundo musulmán.
LA ÉPICA ESPAÑOLA Y LA TRADICIÓN ORIENTAL
Conocida es la importancia de la juglaría musulmana en las cortes de la España cristiana, así comobma
compenetrada actividad profesional de juglares moros y cristianos. El iniciador de la tesis de la influencia
árabe en los orígenes de la épica española fue Don Julián Ribera.
Un análisis comparativo entre la épica árabe y la épica castellana nos descubre una serie de motivos
temáticos comunes a las dos epopeyas. La confirmación de un influjo real de la épica árabe en la épica
castellana habrá de deducirse de la suma total de características comunes:
1. La costumbre de designar con nombres propios a las armas, que responde a una realidad histórica en
el mundo musulmán y sólo literaria en la épica romance. Esta nominalización de las espadas está en
relación con el valor mágico de la palabra.
2. La huella musulmana en la épica española o francesa se deja traslucir también en la
concepción misma de la guerra contra el infiel.
3. Otro elemento fundamental de la guerra santa, es la presencia del angel Gabriel que, como un reflejo
de la tradición oriental, aparece también en la románica.
4. Ardides o engaños de guerra que muestran la capacidad intelectual del héroe para idearlos y ponerlos
en práctica y que lo adorna de dimension humana.
5. La presencia de la mujer en la guerra o el tema de la mujer de alta alcurnia consolador del cautivo.
6. A moldes árabes se ajustan el desconcertante realismo y la historicidad de la epopeya castellana, que
resalta la condición humana.
La Leyenda de los Infantes de Salas es una obra compuesta por toda una serie de elementos temáticos
relacionados con la tradición árabe.
La epopeya castellana se nos muestra muy familiarizada con usanzas y modos de la vida árabe, que trata de
acercar lo más posible a las incipientes manifestaciones de las literaturas románicas. El resultado es una
épica mozárabe.
POESÍA LÍRICA PROINDIVISO
No sólo la lírica románica de los orígenes utiliza en ocasiones la estrofa zejelesca (sistema métrico ideado
por Mucaddam de Cabra, en el siglo X) y coincide también en los temas fundamentales del amor cortés,
según normativa árabe, que se hacen moda poética a partir del siglo XII, moda pasajera en la lírica románica,
mientras que responden a ideas permanentes y antiquísimas en la literatura árabe.
LA NARRATIVA Y LA PROSA DIDÁCTICA
Por las mismas fechas en que vive el primer trovador Guillermo de Aquitania, un judío converso de Aragón,
Rabí Moisés Sefardí traducía al latín del árabe una colección de cuentos orientales. Así, se introdujo en